Pestiños

Aprovechando que es semana santa, vamos a hacer una receta típica, que nunca falta en mi casa en estas fechas...los pestiños. Es un poco tarde para hacerlos, pero hemos elegido la tarde perfecta, ya que nos hemos juntado la madre, la hija y la sobrina!
Creo que por esta zona no son muy conocidos, pero están riquísimos, y no se puede desaprovechar esta oportunidad!

Ingredientes:

- Aceite de oliva
- Matalauva (más conocido como anís en grano)
- Harina
- Vino blanco

- Anís del mono

Preparación:

Echamos un vaso de aceite de oliva a la sartén (la receta se basa en esta medida, si queremos menos partiremos, por ejemplo, de medio vaso), junto con el anís en grano (para que no sepa tanto a aceite al añadirle el anís) y lo calentemos, nunca dejamos que se fría el anís, sólo que se tueste un poco. 

Cuando ya lo tengamos, dejamos que se enfríe un poquito y lo colamos, para así quedarnos sólo con el aceite. Lo echamos en un bol grande, donde añadiremos un vaso de vino blanco con un poco de anís del mono.

Añadimos harina poco a poco, removiendo con una cuchara para que no haga grumos; en el momento que se espese un poquito, comenzamos a amasar hasta que no se quede pegado ni en las manos ni en la mesa.

Entonces separamos pequeños cachos y, con la maza, hacemos la masa lo más fina posible. Después, juntamos cada esquina de forma que nos quede una especie de lacito. 

Calentamos aceite, los freímos y, cuando se enfríen, los rebozamos en azúcar glas. Y esto es lo que nos queda, un postre fácil de hacer, y una tarde divertida! Ya veis que Marina se comía la masa hasta cruda! 

Lentejas

Esta semana toca el plato estrella, el qie odiaba y no podía ni ver hasta que me fui de casa. Entonces empecé a echarlas de menos y, cada vez que volvía a casa, pedirle a mi madre que me las preparara y que me enseñara a hacerlas.

Con el tiempo me animé a prepararlas yo y, durante una temporada, llegaron a ser terapéuticas.

Ingredientes:

- 1 cebolla
- 1 ó 2 zanahorias
- 1 pimiento rojo
- 3 patatas medianas
- 1 chorizo por persona
- 2 puñados de lentejas por persona (a mi me gusta que la proporción de lentejas sea mayor que la de verduras, así que si veo que hay pocas añado un puñado de regalo)
- Agua
- Ajos y laurel

Preparación:

Cortas la cebolla y la sofríes en una olla; cuando esté a punto de hacerse, echamos el pimiento y las zanahorias, junto con las patatas en taquitos.

Echas las lentejas y los chorizos, y lo cubres todo con agua. Le echamos sal al gusto, una cabeza de ajo y un par de hojas de laurel.
Pones el fuego a tope y tapas la olla; cuando rompa a hervir, lo bajas al mínimo. Si lo haces con tiempo, puedes dejarlo hervir un par de horas, para que se espese, aunque a mi me gusta más después de una hora.

Ya tenemos un plato sanísimo, fácil de hacer y que sale buenisimo.
A ver si os animáis a probarlo y lo compartís!

La preparación no es tan bonita como en las otras entradas, pero no tuve la gran ayuda de Quique... :)

Caña de calabaza

En esta nueva entrada toca, por fin, la mejora parte de la comida: el postre. Yo los prefiero de chocolate (espero que con el tiempo nos vayamos dando cuenta de eso...) pero esta idea fue de Quique, quien vio la calabaza asada y lo montó en un segundo.

He de decir que quedó buenísimo, y que a mi madre le gustó tanto la idea que la repitió en una comida familiar, donde triunfó. Así que os animo a probarla!!

Ingredientes:

- Calabaza asada al horno (nosotros habíamos asado media calabaza, de la que cogimos una cuarta parte para hacer tres "cañas") 
- 250 ml. nata líquida para montar 
- Azúcar 
- Agua

Preparación: 

Hervimos agua con azúcar (al gusto) para hacer el almíbar. Una vez haya roto a hervir, le añadimos la calabaza y lo batimos, añadimos agua hasta que observemos que se queda suave como una crema.

Servimos la mezcla en vasitos, llenos hasta la mitad más o menos; batimos la nata (con azúcar al gusto) y la añadimos en los vasos hasta llenarlo (por los comentarios que hicieron, cuanta más nata mejor, aunque eso si a uno le gusta la nata siempre pasa!).

Y, así de fácil y rápido, ya tenemos unas cañitas de calabaza, listas para servir, aunque si las guardas en el frigorífico quedará igual de bueno!

Gracias otra vez a Quique, quien espero que se anime otra vez a enseñarme alguna que otra cosa!